Nuevo gobierno, nuevo constituyente, nueva Constitución. Tal fue el postulado del extinto EZLN, que en tal forma sintetizaba la herencia del clásico griego. Para lograrlo, la organización celular autogestionaria fue la herencia que nos legó la vertiente obrero-estudiantil de 1968. No congelarse en el puro reniego y la pura exigencia, no multitudes ni mega-marchitas, que desde las grandes “movilizaciones” de maestros, ferrocarrileros, etc., de fines de los 50s del siglo anterior, han probado ser obsoletas, que ya el gobierno sintetizó el antídoto: “ni los veo, ni los oigo, y háganle como quieran”. Tal es, en esencia, el legado del estamento proletario-estudiantil de 1968, un cambio histórico que sólo nosotros, las masas sociales, podemos y debemos lograr, y que Echeverría, con ayuda de sus cooptados del 68, se encargó de desmantelar, erradicando de nosotros la memoria histórica y con ella la conciencia de cambio estructural del Sistema y del enemigo histórico de tal cambio.
Conciencia de enemigo histórico: en 1990 escribía Heberto Castillo, beneficiado con la “apertura democrática” de Echeverría:
“Necesario es precisar que no se pretende matar al PRI sino sólo que se convierta en un verdadero partido”.
¿Quiénes lo habrían de convertir en “un verdadero partido? “Empleados, obreros, campesinos, empresarios, comerciantes, estudiantes, profesores, intelectuales, mujeres jóvenes y los principales partidos políticos, distinguidos militares y sacerdotes”. ¿De veras, Castillo? ¿Y el cambio histórico? ¿Y el enemigo histórico de nuestro cambio?
Así protestó el “aperturo” contra las desmesuras de Salinas presidente y su programa Pronasol, y a esto quería yo llegar: a la desmemoria de los pueblos débiles. ¿Conque regresa Salinas al pantanoso terreno politiquero? ¿No era el villano al que se achacaba el robo de la presidencia y de la mitad de la cuenta secreta? ¿No se le achacaba ser el autor intelectual del hecho de sangre que condujo a Zedillo a Los Pinos y al error de diciembre de 1994? ¿No se acusaba a Salinas de concretar la depredación iniciada con el viejo Raúl y redondeada con Raúl el joven, pasando por Enrique, Adrianita y congéneres? ¿Entonces? Las masas sociales que olvidan su historia siempre están condenadas a revivir sus Dráculas. Sin más.
Conque regresa Salinas. Hoy, entrevistado sobre “democracia”, la conductora le exigió un ejercicio de autocrítica. Zorro colmilludo, el tal cantinfleó lamentándose: Solidaridad no alcanzó todas sus metas. Yo entonces, encogido el ánimo, recordé aquellos tiempos, qué tiempos aquellos, cuando los medios de condicionamiento de masas nos aturdían con la propaganda del Pronasol, como el memorándum en que el Salinas presidente ordenaba a los gobernadores donde se desarrollaban procesos electorales que utilizara propaganda con las siguientes frases:
Solidaridad trajo la luz a Chimalhuacán – Solidaridad significa introducción de agua potable en Chalco – Solidaridad son mejores aulas en el valle de Chalco – El PRI representa la solidaridad entre los mexicanos – El PRI es solidaridad con el presidente de la república – La solidaridad del PRI es con el pueblo – El PRI es solidario con quienes más necesidades tienen – El PRI es solidario en la solución de los servicios municipales – Votar por el PRI es votar por la solidaridad – Obtengamos mayor solidaridad votando por el PRI…
Y yo les pregunto, mis valedores: ¿conque vuelve Salinas? ¿Su manipulación en los “medios”, distinta a la de Calderón? (México.)