Coitus interruptus

Así es, mis valedores: miro y remiro su vera efigie hasta bizquear. Observo el rostro presidencial en el matutino y me parece un trasunto del rostro del México actual.  Tenso rostro,  crispado, desencajado, fruncido en un gesto de angustia y desesperación porque no se encuentra por donde salir de las arenas movedizas. México, Peña.

Ya el acongojado abandonó la sonrisa; ya abatió un índice en alto como fálico signo de juventud, sus dos brazos abiertos de par en par ya se cerraron y se aflojaron las manos. Ya la actitud del hombre de Los Pinos dejó de ser la del (qué mal chascarrillo) Estadista del Año que intenta atraer y acunar al mundo entre sus brazos abiertos. Ahora el soñador continúa moviendo a México, pero en dirección opuesta a la del propósito original. Al PRI-Gobierno reformador se impone el PRI-Gobierno de siempre: ferrocarrileros de Valentín Campa y maestros de Othón Salazar, Tlatelolco y Ribera de San Cosme, cárceles clandestinas y guerra sucia. Acteal, El Bosque, El Charco, Aguas Blancas y el territorio patrio pespunteado por una viruela mortal de fosas clandestinas…

Y ocurre en tiempos anubarrados, cuando las aguas bajan turbias, que resalta la oportunidad del editorial gráfico. Recuerdo, a propósito, la caricatura que se publicó hace ya algunos sexenios, cuyo autor ignoro a estas horas, que ilustra la clásica sesión de “interrogatorio científico”, como el que tal vez  hayan aplicado a los presuntos asesinos de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. Ahí al sospechoso de ser sospechoso se le administra por la nariz agua de Tehuacan con polvo de chile piquín, para luego introducirle la cabeza en el pocito santo, y cuando están por estallarle los pulmones sacar al interrogado y escupirle la frase sacramental:

– ¡Habla, cabrón, y evítate otra madriza!

Ese pudiese ser el editorial gráfico de hoy día, pero con la variante que apuntó el caricaturista:

– ¡Calla, cabrón, y evítate otra madriza!

Calla nombres y apellidos de los tantísimos cómplices de los Abarca y Pineda, civiles, políticos y militares involucrados en los lodosos negocios del robo al erario público y el tráfico de droga, de los secuestros y las desapariciones, de los asesinatos e inhumaciones en fosas clandestinas. ¡Calla, o atente a las consecuencias!

Mis valedores: ¿algún día las masas llegaremos a saber los nombres, pero  todos los nombres, desde el más alto al de más bajo nivel, de los políticos que los Abarca y Pineda están vomitando a estas horas? ¿En este sexenio lo llegaremos a saber? ¿En el gobierno de Peña y la burocracia política? ¿Derecho a la información, dice alguno de ustedes..?

Y la única, lacerante verdad: el clamor de unos padres huérfanos de sus hijos, y la respuesta del de Gobernación: “Prepárense para el todos los escenarios. Para el peor de los escenarios. Yo, por lo pronto, ya me cansé”. Mis valedores:

Ese es  el signo del tiempo mexicano. Uno de los más sórdidos criminales  es el más valiosos para el Sistema por lo que sabe de la narco-política, y por lo que debe callar. Por él padecen insomnio muchos  personajes de la vida pública del país, tanto en la iniciativa privada como en los terrenos “religiosos” y en los politiqueros, en especial entre todos los chuchos colaboracionistas y migajeros de esa mafia que lleva el alias de “nueva izquierda”.

Pero hablando de insomnios: ¿al hombre que duerme en Los Pinos no se le habrá ido el sueño? ¿Quizá Prozac, método Fox?

La crónica de las ruinas de un triunfalismo en brama que terminó en coitus interruptus, mañana. (Vale.)

Un pensamiento en “Coitus interruptus

  1. Cualquiera que esté ebrio de poder, que tenga el cerebro lavado que se crea predestinado a llevar a cabo las ordenes del coloso de norte América, porque avala el 2 de octubre de 1968, el 10 de junio de 1971, Actial, aguas blancas, el charco, Cananea, Rio Blaco, y entonces puede ordenar mascrar Atenco, Ayotzinapa,(Cocula), San Pedro Limón (Tlatlaya) y así cumplir con el profeta que dijo sale muy caro mantener una guerra eterna con México, es mas fácil y económico educar en nuestras universidades a los intelectuales que destaquen, ellos eventualmente tomarán el poder y serán mucho mejores administrando para nosotros sin tener que gastar un sólo tiro. A eso se debe que se han borrado de los libros de historia las batallas de Churubusco, Molino del rey, la de la Angostura, Castillo de Chapultepec, Veracruz, Tampico…. El pueblo que olvida su historia está condenado a repetirla.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *