Y que al adquirir Monsanto la empresa mexicana Seminis gran parte de la selva lacandona está por convertirse en propiedad de la transnacional , según acusa Hermann Bellinghausen en el matutino del 16 de febrero . Reforma había denunciado el 26 de mayo del 2003:
La reserva de la biosfera de Montes Azules , en Chiapas , tiene riesgo «inminente» de violencia entre las comunidads que la habitan , se advirtió al gobernador de Chiapas y al presidente del país
Chiapas , selva lacandona: conflictos de tierras , devastación de los bosques , enajenación a la rapiña transnacional . Para los capitalinos el conflicto de Montes Azules parece remoto , pero no ; al igual de eso que ocurre con el energético , riqueza de los mexicanos , y los amagos de un gobierno pro-yanqui (¿amagos nada más) de entregarlo al vecino imperial , los bosques tambien son vida y riqueza de y para todo el país , una riqueza a diario codiciada por las transnacionales.
Por ello es que me permito referirme a lo extenso a ese requemante problema de la selva lacandona. Hoy daré a ustedes una referencia , otra mañana , o la semana que viene , o el próximo mes , pero que conozcamos el problemón como los árboles: desde sus raíces , en este caso históricas . Los descubridores de la riqueza lacandona , sus explotadores transnacionales , la ruina en que van dejando d aquellas selvas . La historia:
Para empezar , lo inaudito: que para rapar la selva , las transnacionales actuaron siempre con permisos debidamente legalizados… ¡ por el gobierno de Guatemala! Que tan sólo en la década de 1860-70 y que únicamente de cedro y caoba , los extranjeros cortaron más de 73 mil 700 árboles de la selva mexicana. Nunca imaginé cifras y datos tan escandalosos , tengo aquí , sobre mi mesa , documentos que alguna vez me hizo llegar Cuauhtémoc González Pacheco , investigador del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM y autor de El capital extranjero en la Selva de Chiapas (UNAM , 1983). Me acuerdo.
El estudioso se apersonó conmigo , y el tanto de toda una tarde se puso a hablarme de Chiapas , y en la intensidad de sus palabras había la pasión de cuando uno se expresa de la amantísima. Me dijo de un Chiapas selvático que , ante la ira impotente de la comunidad y la indiferencia de gobierno , caciques y talabosques , perdía inexorablemente su riqueza vegetal , ahora en manos de extraños , manos transnacionales . Al despedirse me dejó el altero de documentos que ahora comparto con todos ustedes.
«Si miramos en retrospectiva la historia de los últimos cien años de la Selva Lacandona , la más importante selva alta de México , nos sorprenderá no encontrar en ella las esperadas imágenes de una selva virgen poblada por escasas familias de indígenas lacandones ; lo predominante será un pujante desarrollo de empresas madederas bien constituidas y patrocinada por el capital extranjero. Esta realidad tan poco romántica se inició cuando todavía no se utilizaba el aeroplano. Uno se pregunta cómo fue posible que las grandes transnacionales de entonces descubrieran , escudriñaran y dsposeyeran a la selva y a sus habitantes de sus riquezas , cuando la mayoría de los mexicanos de entonces ignoraban su existencia …
Los descubridores de la selva . Felipe Marín y Juan Ballinas descubrieron que los ríos eran el medio para sacar los árboles de maderas preciosas de la selva lacandona . Felipe Marín cortó 72 árboles en la década de 1860 y los lanzo dese el punto donde el río Usumacita toma tal nombre , para comprobar que eran conducidos hasta la salida d la selva , a un sitio llamado Boca de Cerro, cercano a Tenosique , Tabasco . Este lugar muy pronto se convertiría en un importante centro de empresas madederas , pues en él se asentaron los hombres encargados de atrapar las trozas que el río conducía y entregarlas a los empleados de las compañías madederas , quienes las llevarían por el mismo río a los hombres encargados de atrapar la madera…»
Y que ahí se asentaron quienes atrapaban los troncos y los entregaban a los empleados de las compañías madederas , que las llevaban por el mismo río a los puertos de embarque : Frontera y Ciudad del Carmen. «El descubrimiento de Marín inauguró la explotación de las empresas llamadas montería que operando desde Guatemala con permiso otorgado por ese gobierno , extrajeron madera de la selva lacandona de 1860 a la siguiente década y …» (mañana)
elvaledormx@yahoo.com.mx
Siempre que pueda reproducire en este espacio la Columna que publica diariamente en el Periódico Metro el Maestro Tomás Mojarro.