La Guelaguetza

«¡Yo soy Oaxaca!, en la presencia de sus siete regiones; en sus trajes de vértigos en colorido que roban al paisaje los tonos de su luz; en el perfil moreno de sus mujeres disimiles de carácter, a veces místicas, humildes, soñadoras y también alegres y agresivas en la belleza; fieles hasta la obsesión y sacrificadas hasta el coraje..! ¡Yo soy Oaxaca! Y hablo con la voz de mi fértil suelo, de mis agrestes montañas, de mis fecundos bosques y de mi tierra erosionada; con los cafetos y la copra señoreando el cielo con la brisa de un mar intensamente azul, que retrata entre sus aguas las alturas; también, y con el agrio dulzón de mis piñas derramando sus mieles en las bocas que rezan un rito de emoción. Así, con esos labios, voy a dialogar hacia mí misma…»Cálida prosa, mis valedores, esta con la que Don Francisco Hernández Domínguez trova a su tierra, prosa a la que me permito agregar: Yo soy Oaxaca, y soy La Guelaguetza, que es decir la máxima expresión de cultura, folklore, raíz, tradición y seña de identidad de este pueblo que es abanico y mosaico de tantos pueblos. Yo soy La Guelaguetza, sobrevivencia de un mundo mágico. Mis valedores: ¿algunos de ustedes habrá asistido por estas fechas a los llamados Lunes del Cerro, los dos siguientes al 16 de julio, en el Cerro del Fortín, al oeste de la ciudad? ¿Alguno ha admirado esa que es, a ojos, oídos y espíritu, maravilla de color y fulgores, y encantamiento de sones, tonadas, clamor y recitaciones de música y flor, olanes y plumas, y brillos y cintas enrevesados juegos coreográficos que saben a raíz de un pueblo que es multitud de pueblos, y a esencia idiosincrasia, identidad? Cierro los ojos y miro de piel adentro, y me veo mano con mano de una mujer. Una ixtepecana de nombre Nallieli, que significa: «yo te amo». Cerrados los ojos contemplo semejante parvada de danzantes llegados de las siete regiones, un cuajarón de penachos y máscaras, danzas y ofrendas, que al vivo rayo del sol ejecutan un largo ceremonial acompasado a tonadas que a toda garganta y a pecho abierto se claman en tono mayor, o se salmodian a lo hondo a lo memorioso, a lo melancólico, en un acompasado tono menor. Me acuerdo…

Porque yo, mis valedores, mi mano en la mano de mi única, istmeña de Ciudad Ixtepec, año con año desde hace años presenciaba esa ceremonia que es síntesis y amalgama de lo indígena tradicional y español y mestizo, donde se queman el copal y el incienso a Centéotl, diosa del maíz tierno, y a la Virgen que vino de España y convive en santa paz con la Princesa Donajl, con el rey Cosijoeza y el arrogante Zahuindanda, el Flechador del Sol

A la fiesta del espíritu y los sentidos pensábamos asistir mi Nallieli y su servidor (servidor de ella), este mismo año. Contando las horas se nos iban los días, pero lástima, que con algo no fuimos a contar, y esa fue la invasión de los bárbaros, unos bárbaros que pocos días antes fueron maestros y que, según costumbre ancestral en el benemérito gremio y por unas causas justísimas, en Oaxaca habían iniciado su lucha anual con las consabidas estrategias de lucha, unas estrategias ya rancias de tan viejas, ya apolilladas,que desde fines de los años 50s han certificado ser obsoletas porque el Sistema de poder ya sintetizó el antídoto, y aun se da el lujo de revelarlo a los demandantes: «Ni los veo, ni los oigo, ni los siento. No se puede, y háganle como quieran«.

Y qué lamentable, mis valedores, que una causa tan justa como la reivindicación salarial derive en una así de grotesca, desmesurada e inútil como es la exigencia de la caída del gobernador. ¿Para que el «Sistema» designe a algún otro igual o peor? Que una causa tan noble como la reivindicación salarial degenere en la exigencia absurda, y de ahí se caiga al garrote, la hornaza, la destrucción, y que a mí y a tantos nos dejaran vestidos, alborotados y alborozados, yo, reluciente mi chaleco de pelos y ni única con los collares de monedas de oro, su traje de tehuana con el «resplandor» con que habría de enmarcar el resplandor de su rostro. Y qué hacer. Vestidos y alborotados, mi Nallieli y su amador, como también los oficiantes de La Guelaguetza, esos que son el espejo y la flor de la «briosa raza de bailadores de jarabe», que dice López Velarde. Y qué hacer…

Sindicato de maestros. Demandas, las de siempre Estrategias de lucha, las consabidas. Autocrítica de los estrategas, ninguna Más de medio siglo de mega-marchitas, bloqueos y plantones, cero resultados. Hoy, sindicato de maestros, sección 22. Toma de edificios y cierre de calles, conatos de incendios y clausura de puerta de hoteles. ¡Y a quemar las instalaciones donde se iba a celebrar La Guelaguetza! ¿Así, desde hace más de medio siglo, defienden causas justísimas? Con esa estrategia compitas maestros, ¿qué caraj…mbas han conseguido para su causa? ¿Qué..? Ah, la rutina la mediocridad, los maestros. (En fin.)

6 opiniones en “La Guelaguetza”

  1. Maestro Tomás Mojarro,

    Entré a su página tal como usted lo dijo en su programa Domingo Seis del día 23 de julio, para conocer las acciones de resistencia civil pacífica que usted sugiere llevar a cabo.

    En este preciso instante no he encontrado nada en esta página. Quizá aún no han subido la información. Le pido que me envíe estas acciones a mi correo, ES URGENTE.

    Le envío saludos y le agradezco por la infomación que pueda proporcionarme.

    Atte. Mayra Velázquez López.

  2. asi es valedor
    los movimientos sindicales en méxico se han convertido en la vía de acceder al botín que representan los cuantiosos montones de dinero vía cuota sindical que mensualmente la federación descuenta a todos los trabajadores de base en el caso de los empleados federales como es en el del sindicato que aglutina a los maestros y que la misma federación hace cooparticipe a la antes podrosa fstse, actualmente en manos, en ambos casos de satrapías hartamente conocidas.
    el espiritu del verdadero sindicalismo aquel que nació con los movimientos sociales pa finales del siglo antepasado han quedado en el olvido, quiza solo sirvan de pretexto para holgar un primero de mayo.

  3. hola, buscando infoirmnación de acteal me encontre contigo, me parece raro que tu hables de acteal con la verdad y de oaxaca como cualquier gobiernista, con lo que lei de acteal en tu blog, pense que eras una persona que analizaba e investigaba, no se si tenias la informacion de que los maestros estan en una lucha desde hace 26 años, y que en sus pliegos petitorios no solo piden para ellos, que es justo y muy necesario que ganen un poco mas,ya que tienen una responsabilidad muy grande, que es el cuidado de nuestros hijo, no se si tu los tengas, pero a mi, como ciudadana, me sirve mas un maestro que un mendigo vividor diputado y que gana mas de $80,000.00 mensuales mas bonos y corrupcion, y que no trabaja para elbien del pais, solo se la pasa aprobando leyes en contra del pueblo, talvez no lo sepas pero gracias a la lucha de los maestros hay libros gratuitos para secundaria, hay desayunos comunitariosa gratuitos para los alumnos de las comunidades mas lejanas, y que por falta de recursos llegaban a las clases sisn desayunar y pues asi no se aprende o tu que piensas, el año pasado vinieron y resulta que el exgobernador ULISES RUIZ ORTIZ, acepto el pliego petitorio y firmo el acuerdo, pero les mintio a los maestros, no hubo cumplimiento de los compromisos por parte del gobierno, aqui si revisas mi space, destruyo nuestro patrimonio historico, en el zocalo saqueo la cantera y debajo de ella, estaba el empedrado que piso Juárez y todo lo quito y preguntale a donde se llevo la cantera, las puertas de la catredral ya no son las originales del siglo antepasado, y la guelaguetza que dices venias a ver era solo un show que ya no era autoctono, era un robadera de dinero como no tienes idea, nunca vimos nosotros como pueblo, el dinero que salia de esa fiesta, no me refiero a que nos lo entregara, si no que nunca vimos a donde se invertia, no tenemos ley de transparencia, este año pagamos una tenencia de mas de $800.00 por un tsuru mod 91, y tambien eso no sabemos a donde se va, para las obras que estan realizando que mas bien es destrucción, no fueron licitadas solo dadas al mejor transa, y desvio el dinero de las tranzas a la campaña de Madrazo. si esto que te digo no te parace suficiente para que nosotros nos levantemos y pidamos su destitucion? a parte claro de la represion, el ataque armado a radio universidad, y mucha represion mas.

  4. ha perdon se me olvido aclararte que el pueblo nos agarramos del magisterio, por lo organizados que son para hacer amplio el reclamo a todo el abuso en nuestra contra del ex gobernador.

  5. Maestro Tomás Mojarro:
    Antes que nada quiero decirle que coincido plenamente con su punto de vista. Es lamentable que el festival folklórico más importante de América Latina haya sido suspendido el año pasado, y que muchos turistas hayamos tenido que volver a nuestros lugares de origen con un palmo de narices… Este año, aún con la incertidumbre de presenciar o no el Lunes del Cerro, asistí junto con amigos de todo el mundo radicados en el DF, y gratamente todo se realizó sin contratiempos.
    Me atrevo a escribirle precisamente porque una amiga francesa, Catherine Bellaton, me ha solicitado una traducción de la prosa «Yo soy Oaxaca» de Francisco Hernández Domínguez. Pensé encontrarla en español en Internet -para luego yo traducirla, pero lamentablemente sólo he hallado el fragmento que usted incluye en su comentario. Así, le suplico que -de tener la versión completa- me haga el enorme favor de enviarla vía internet, a mi correo albertocadenamtz@hotmail.com
    Espero no haberle robado su valioso tiempo, e independientemente de su respuesta agradezco de antemano la atención al presente mensaje.

    Act. Alberto Cadena Mtz.

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