Noviembre esta vez , mis valedores . Hemos entrado al mes de los fieles difuntos , los ecos de ultratumba , el memento homo .Noviembre , a la entrada del mes ceniciento , me pongo tristón , memorioso , y me aplico a discurrir del ánima de noviembre , ese fantasmón : Don Juan Tenorio. Y lo estoy oyendo en el aparato: fachendoso , fanfarrón , arricado.
Vida hazañosa…
Noviembre es el mes de Don Juan Tenorio , cuando la tradición se encuentra y da testerazos con el figurón sevillano de oropel , capa y espada , pulmón al viento y desplantes de matasiete , ese macho entre machos que recorre las noches sevillanas siempre en urgida brama de amoríos de traspatio , de trasputín, que algunos resultan los más sabrosos . ¿Por efímeros…?
Noviembre , mis valedores , da vida -efímera también – al romanticismo teatral del XIX español , que en escenario frondoso se nos torna hazañas y tropelías del héroe de fuegos fatuos y lances de encrucijada , el bigardón de la bravata y el voto a tal : el de las imprecaciones a cielos e infirernos y las sabrosas -debí tachar el adjetivo – agresiones de honras femeninas . Noviembre da vida pasajera -pasajera también , como toda que se respete – a la rendida y crédula doña Inés , y ala de Pantoja que a lo largo de los 30 días de este mes vuelve a troncharse al asedio verbal , todo retóricas y prosopopeyas , del labioso logrón de toso lo que huela a cosa femenina , esa gloria – debí tacharlo también .Aquí tomándolo en serio y allá entre befas , morcillas y chabacanas parodias , este mes y sobre el escenario habrá de resucitar la procesión de fantasmones que , pese a su tufo de cadaverina y formol , sobrellevan empaque de inmortales…
Noviembre: del repertorio romásntico español (desde los arranques del XIX) se nos cuela vivito y trovando ese Don Juan de las fanfarronadas y los queveres de alcoba . están aquí las balandronada en metro octosílabo y los arranques aspaventeros del bueno del Burlador , azote de hogares con mozas honestas y hosterías con mozas del partido , que para el gusto del garañón da igual. Aquí llega, raso terciopelo , y aquí clama una vez más , y una vez más para burla , el Burlador de honras femenidas: ¿No es verdad , ángel de amor?
Noviembre : es por gracia de esos imponderables que nunca faltan en la humana industria , que m Don juan se alza a la mitad del foro y resiste el paso de las épocas , las glosas más burdas y las más crueles parodias , las más chabacanas y convenencieras de la industria del espectáculo . Aquí está Don Juan Tenorio para el que quiera algo de él…
Mas ay , que me canso en vano – de tirar golpes al aire…
A propósito; ¿ es este Don Juan , de veras , la representación de un determinado carácter humano? ¿´Se trata de un personaje real , posible , de tres dimensiones? ¿O es un mito , sin más ni más? ¿Quizá no pasa de ser un sueño , y los sueños sueños son? En algún punto de estudiosos se ponen de acuerdo: en modo alguno Don Juan Tenorio representa al prototipo de caballero español , ni el del aventurero , ni el del conquistador de honras femeninas ; los elementos que forman la psicología del Tenorio son irreductibles a un ente humano. es un mito , y los mitos mitos son . Será , pero su estatura de héroe a la altura de las galerías , su empaque de gallo , de macho garañón a ojos del vulgo , su mala fama , tan buena , de revolvedor de agazapados deseos y apetitos mal confesados , ¿quién se los quita..?
Mil embusteros y locos – dan en esos disparates…
Dificil tratar un mito , una entelequia , una sola sombra larga construida con la misma sustancia con que se traman consejas y fantasmones ; difícil habérselas con ese aparecido anual cuya sustancia de la del muerto Comendador , frente al que en esa cumbre del genio humano que es Don Giovanni de Mozart , que ahora mismo estoy escuchando , impreca leporello:»¡Ah , quelche anima sará del altro mondo , che vi cinicen a fondo..!»
Mito será , formol y carantoña engolada muy al XIX español, pero ahí nos llegó , con noviembre , este sevillano de utilería , drama y parodia , para el que quiera algo dél : mi Don Juan el burlador…
Mas …sombra , delirio fue – Yo en mi mente lo forjé…
Y a propósito : ¿quién fue aquél José Zorrilla , creador por antonomasia del Don Juan? Zorrila fue un cirto dramaturgo que vivió once años en México , para de vuelta a su tierra vilipendiarlo; fue uno que llevó vida arrastrada , uno que vendió su alma ( su Don Juan) por mucho menos de lo que vale el dramón ; uno que , impaciente , asentó esta frase novembrino:
Lo que constuiría mi desgracia sería vivir todavía algunos años más . Y firma José Zorrilla.
Conque no paséis afán de aquí adelante , por mí , – que como vivió hasta aquí – vivirá siempre Don Juan… (Vale)
Sólo quiero senarlarte que soy muy nuevo en los blogs y realmente me encanta tu pagina. Lo anadire en mis predilectos. Excelente pesquisa! Muchísimas gracias por exponer con nosotros tu sitio web.